Los Presidia Slow Food apoyan pequeños productos tradicionales que corren el riesgo de desaparecer, recuperan artesanías antiguas y técnicas de procesamiento, salvan razas y variedades nativas de vegetales y frutas de la extinción.
El proyecto promueve el territorio, da visibilidad a los pequeños agricultores y las actividades que realizan en su territorio.
Muchas políticas intentan mejorar los productos y productores de calidad mediante la creación de marcas protegidas también a nivel europeo, entonces, ¿cuál es la diferencia con los directores? El productor de la guarnición sigue una especificación de calidad que está de acuerdo con los otros productores, con Slow Food Italia y la Fundación Slow Food para la biodiversidad onlus. Esta especificación coloca la protección del medio ambiente en el centro de producción y crea vínculos con los otros productores de la guarnición y, si la guarnición prevé una transformación, con quienes producen las materias primas (ya sea carne, trigo o huevos) y quienes las transforman. creando una comunidad. A esta comunidad le siguen dos figuras importantes: el contacto del productor que forma parte de la comunidad y el contacto de Slow Food que se encarga de la relación entre la comunidad y la asociación internacional. La estrategia es desarrollar dentro de la comunidad un orgullo y un sentimiento de pertenencia que a menudo los agricultores o criadores individuales tienden a perder.
El presidium nació en un proyecto concebido “juntos” por esta razón, el apoyo económico para el proceso que se lleva a cabo a menudo es otorgado por organismos públicos: municipios, región de Campania, cuerpos de parques, comunidades de montaña u otros temas.
Para el movimiento Slow Food, crear una red es un objetivo fundamental porque a través de la red nos reconocemos, intercambiamos buenas prácticas, implementamos estrategias que son “distintas” a las estrategias de mercado.
La red recorre el camino de la cadena corta a través de los mercados de la tierra, los gases, los cocineros de la alianza. Al invitar a las personas a sus empresas, a través del sitio de fundación de comida lenta que pone los datos de contacto de todos los productores, para conocer los productos y productores del territorio.
El objetivo es sensibilizar al consumidor, que por casualidad no se llama coproductor en Slow Food, de modo que a través de la remuneración correcta de ese producto, el trabajo de aquellos que cultivan, sino también de aquellos que, en la práctica, a través de su acción, les hace vivir. y defiende ese territorio.
En la tabla podemos encontrar los Presidia reconocidos en Cilento.
Epigrafe: Para el movimiento Slow Food, crear una red es un objetivo fundamental porque a través de la red nos reconocemos, intercambiamos buenas prácticas, implementamos estrategias que son “distintas” a las estrategias de mercado.